GRIETAS: APRENDA A IDENTIFICARLAS Y CUÁNDO SON PELIGROSAS EN CONSTRUCCIÓN

No identificar grietas adecuadamente puede poner en peligro la seguridad de tu construcción y, sobre todo, la tuya y la de las personas que habitan o asisten frecuentemente a la misma. Por otro lado, realizar un mal diagnóstico de ellas puede llevarte a realizar un gasto innecesario al recurrir a un método extremo como la demolición, la cual no siempre es pertinente.

 

Diferencia entre grieta y fisura

La diferencia entre una grieta y una fisura radica en que la grieta presenta una anchura y profundidad mayores, por lo que el riesgo que implica para una construcción es más alto. En este sentido, las fisuras no son peligrosas para la estructura de una edificación, ya que son aberturas superficiales y meramente estéticas, por lo que repararlas es considerablemente más sencillo, rápido y económico.

 

En contraste, las grietas suelen dañar la estabilidad estructural de una construcción, además de que su apariencia llega a afectar más visiblemente la apariencia de un inmueble, razones por las cuales se deben analizar oportuna y seriamente para darles el tratamiento adecuado.

 

¿Por qué surgen las grietas?

Las grietas surgen por diversos factores, los cuales se relacionan principalmente con el asentamiento de la construcción y los elementos que componen la estructura de la misma. Para que tengas una idea más clara de estos aspectos, a continuación te presentamos las causas más importantes que originan las grietas.

Errores en la planeación y ejecución del proyecto

Cuando un proyecto constructivo no cuenta con la participación de especialistas o personas con la suficiente experiencia, es probable que se hagan malos cálculos y se cometan equivocaciones durante la planeación del mismo. Además, es pertinente contar con el personal calificado para realizar la construcción, de lo contrario se generarán grietas u otros daños que comprometerán la estabilidad y seguridad de la estructura y de las personas.

Malos asentamientos

Este punto se vincula con el anterior, ya que al no tener una buena planeación, se hace un mal estudio del suelo y se construyen cimientos desnivelados o con una calidad deficiente, lo que ocasiona asentamientos diferenciales y desplazamientos laterales de la estructura, mismos que producen grietas.

 

Sobrecarga de la estructura

Las cargas que de origen no son contempladas para ser sostenidas por los muros de una construcción, sobrecargan los mismos en una o varias áreas, generando diferentes tipos de grietas. Por ello, durante la planeación de un proyecto se debe considerar todo lo que cargará la estructura, como las cubiertas de losa maciza, ciertos perfiles de acero, láminas y otros elementos que se coloquen encima de dichos elementos.

 

Humedad

Construir sobre un terreno con humedad elevada y que genera grietas se vincula con un mal estudio del suelo y con la falta de conocimientos necesarios para darle un tratamiento adecuado, ya que dicha humedad genera un empuje del suelo a los muros de una construcción, además de que puede originar el crecimiento de raíces que agravan el problema. Un buen impermeabilizante te ayudará a prevenir este problema, antes de que sea demasiado tarde.

 

Mala calidad de los materiales

Otra de las causas de las grietas es la mala elección de materiales, ya sea porque no son los adecuados para ciertos contextos, o bien, porque no cuentan con las cualidades y certificaciones necesarias para el tipo de construcción que se realiza. Al respecto, es pertinente contar con un cemento adecuado y de calidad para la elaboración de hormigón, útil para cimentaciones, castillos, columnas, muros y una losa de concreto resistente.

 

Asimismo, es fundamental un acero de refuerzo que presente cualidades sobresalientes para la elaboración de concreto armado, además de contemplar el uso y la preparación de un mortero resistente, para la construcción de cimentaciones con mampostería, así como para levantar paredes y muros con ladrillos, bloques y otros materiales cuya buena unión evite la aparición de grietas.

 

Si te interesa profundizar más sobre la calidad de diferentes materiales empleados en construcción y en torno a las distintas reglamentaciones que la determinan, visita nuestro artículo sobre las Normas ASTM más importantes para Aceros, Concreto y otros materiales de Construcción.

 

Dilataciones

Las dilataciones consisten en la expansión y contracción de una estructura a causa de los cambios térmicos, lo que eventualmente puede generar grietas, particularmente en inmuebles con malos asentamientos, cimentaciones deficientes o que incorporen materiales de dudosa calidad. Otros aspectos relacionados con el movimiento de la estructura y la aparición de grietas peligrosas son los sismos y un alto tráfico de vehículos cerca de la edificación.

Revestimientos mal aplicados

Dado que los revestimientos están encargados de la protección de las paredes, su mala colocación y desprendimiento afectan la resistencia y estabilidad de las mismas, ya que los elementos que las componen quedan vulnerables ante diversos factores que generan su desgaste y agrietamiento, en especial en la parte que se encuentra expuesta a la intemperie.

 

¿Qué tipos de grietas existen?

Las grietas se clasifican de diversas formas, entre las que se encuentran la causa de su aparición, el área donde surgen y la apariencia de las mismas. En este sentido, ya hemos visto distintas razones por las que se originan, y en cuanto a las zonas en las que se manifiestan, existen grietas en muros y paredes, en pisos y, por supuesto, en techos, de las cuales, las más habituales son las primeras.

 

Por otro lado, también existen con diferente aspecto, anchura y profundidad, pero, en términos generales, podemos clasificar a las grietas de la siguiente manera:

 

-Grietas verticales
-Grietas horizontales
-Diagonales
-Escalonadas
-Combinadas (involucran la combinación de las anteriores)

 

Grietas peligrosas en paredes

Este tipo de grietas en la pared se caracterizan por ser particularmente visibles, y su riesgo aumenta en función de su profundidad y el posible daño estructural que representen. Al respecto, a continuación te hablamos de las que puedes hallar en un inmueble.

Grietas horizontales
Las grietas horizontales de riesgo suelen ser causadas por un mal asentamiento de los cimientos de la construcción, la humedad excesiva, las filtraciones o las tuberías obstruidas. Por ejemplo, la mala nivelación del suelo y un mal drenaje pueden combinarse y ocasionar una saturación de agua en las paredes, lo que dañará además la cimentación y aumentará la presión hidrostática.

 

Dicha circunstancia se agrava si consideramos la fuerza del peso del suelo, ya que se puede generar un derrumbe en la base. Finalmente, debes tomar en cuenta que si las grietas en la pared horizontales presentan una ligera inclinación, el daño es muy peligroso, por lo que debes buscar tratarlo de inmediato.

 

Grietas verticales
Entre las causas de las grietas verticales se encuentran la contracción y un mal asentamiento de la estructura, lo que es especialmente peligroso cuando la grieta se ensancha hasta 3, 4 o más milímetros. En dado caso, es muy importante acudir con un profesional para que pueda orientarte en la solución del problema.

 

Además, es relevante examinar la amplitud de los extremos de estas grietas en la pared, ya que cuando presentan un espacio amplio en su parte superior, implica que la cimentación se ha deteriorado o que se está elevando en ese lado del inmueble. En contraste, si las grietas son más amplias en su parte inferior, el lado opuesto de la base de los cimientos es el que se está cayendo o hundiendo.

 

Pero descuida, no todo está perdido, a continuación te presentamos cómo puedes reparar y darle solución a este problema.

 

¿Cómo reparar las grietas estructurales?

La alternativa para reparar las grietas estructurales de una construcción es la demolición y la posterior reposición de los elementos afectados. En este sentido, nunca está de más la opinión de un experto, misma que te ayudará a tomar la mejor decisión con respecto al tratamiento de distintas hendiduras, no solo en paredes sino también en el techo.

 

En cuanto a las grietas en el techo, si son pequeñas, sólo son el resultado del envejecimiento del inmueble o debidas a alguna cuestión vinculada con el asentamiento de la construcción. No obstante, si presentan más de 2 centímetros de ancho, es muy probable que su origen sea estructural, motivo por el que no bastará con tapar las grietas.

 

En caso de que las hendiduras no sean estructurales, debes saber cómo tapar las grietas del techo, y si no, te lo explicamos a continuación:

 

-Desprende la pintura que se encuentra alrededor de la grieta.
-Prepara y aplica el sellador; este puede ser acrílico o asfáltico.
-Lija el área trabajada para darle mayor estética.
-Limpia la zona de residuos.

 

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Fuente:
ACEROS CREA